¿Educación pública, educación privada o educación en casa?

Pequeño melón hemos abierto.

Ante la disyuntiva de cual de estas tres maneras de ver el mundo de la educación es la correcta mi punto me resulta imposible decantarme incondicionalmente por una. Mi preferencia siempre será la educación pública por encima de la privada, al menos desde el punto de vista de que la formación (sin contar la oposición) es la misma en ambos centros. Se puede argumentar que el proceso de selección de las oposiciones es más duro que el que pasa un aspirante a profesor en las escuelas privadas. Ante esto respondo que sí, es cierto, pero el hecho de tener el puesto asegurado de por vida  mientras que en un colegio privado no con lo que las ganancias y el esfuerzo están equiparables.

Si por otro lado hablamos de la escuela en casa la cosa cambia. El problema de entrada es tambíen el que más me preocupa: la falta de regulación. Y no me refiero a que se evaluen los conocimientos ya que eso es perfectamente homologable con respecto a la escuela pública con un examen para obtener el título.

Es cómo y qué se enseña lo que me preocupa pues mientras que en la escuela pública un alumno puede aprobar o no un examen pero sabes, porque así está hecho el sistema, que el conocimiento está impartido por un experto en la materia preparado para enseñar ese conocimiento. Mientras, en una casa, no hay manera de cerciorar que ese alumno esté siendo educado correctamente hasta el hipotético examen antes mencionado. Por lo tanto el meollo de la cuestión reside no en que el alumno pueda demostrar los conocimientos, sino en verificar que el docente en cuestión y lo que se enseña sea suficiente para pasar esos exámenes. Hablando más concisamente: primar el proceso por encima del producto.

Es de hecho este método que eligen muchos padres que se preocupan más por cómo sus hijos aprenden que por el examen en sí y aunque hay algunos detractores que argumentan la falta del entorno social creo que es fácilmente subsanable con actividades extraescolares de ocio.

Mi opinión ante estas tres opciones educativas en resumen es que siempre, se dé la asignatura que se dé, debe ser con un profesor formado en la materia a explicar y en la enseñanza. Este profesional de enseñanza debe además estar regulado por un organo educativo.

Públicas sí, en casa no; públicas no, en casa sí... Y si imaginamos una realidad utópica en la que de verdad se priorize la enseñanza por encima de todo y se pueda decir sin que te tomen por loco: ¿y por qué no pública en casa?